Desde una parte social, los aspectos sociales del mensaje,
en el lenguaje oral existe una negociación de temas,
una referencia compartida y un registro más informal; esto es porque el lenguaje
es contextualizado, depende bastante del aquí y el ahora.
Por otro lado, en el lenguaje escrito tenemos un tema prefijado,
descontextualizado y un registro más formal.
La existencia de estos dos tipos de lenguaje no quiere decir
que uno y otro puedan darse en un registro diferente.
Por ejemplo, uno puede, en ocasiones, expresar oralmente lenguaje que
tiene un registro más bien escrito; si uno piensa en una conferencia, por ejemplo.
Y por otra parte, en ocasiones, uno puede presentar por escrito un lenguaje más,
que tiene características más orales; por ejemplo, si pensamos en algún estudiante,
que escribe muy parecido a cómo se comunicaría oralmente.