Sería muy importante que identifiques cuál es tu mejor momento durante el día
y que las actividades o tareas que requieren de mayor esfuerzo mental,
las lleves a cabo durante este momento, y dejes las tareas más rutinarias o de menos
esfuerzo mental para el momento del día en el que te encuentres, quizá, más cansado.
Finalmente, considera el momento disponible, aquí lo que
tenemos que hacer es considerar el tiempo que tenemos disponible para realizar una
actividad, si cuentas con media hora de tu tiempo en este momento,
elige una actividad que te tome esa media hora de tiempo o quizá menos,
esto te permitirá agotar en su totalidad la actividad y no dejarla pausada,
es decir, inicias la actividad,
se te agota el tiempo y luego planeas retomarlo en algún momento posterior.
Esto es mucho más complicado, pues lo que provoca
es una sensación de una inefectividad personal y además dejas un pendiente.
Entonces, en el tiempo disponible,
lo que vamos a hacer es elegir una actividad que se ajuste al tiempo que
tenemos disponible en este momento, con la finalidad de agotarla en su totalidad.